5 motivos por los que el sistema educativo nos convierte en zombis

Será que estoy de exámenes, no lo sé. Pero hace tiempo que llevo buscando respuestas al porqué la educación mata la creatividad.

Y la cruda realidad es esta… Nuestro sistema educativo actual está creando una generación de zombis. ¿Te sorprende?

El sistema está basado en preparar a los alumnos para el pasado… ¿Y qué es lo que pasa?

Nos encontramos ante una titulitis aguda.

Cuando nuestros padres estudiaban, tener una carrera significaba tener trabajo. Hace unos años, estudiar un máster significaba encontrar un empleo. Ahora, puedes tener tres máster, que no es algo que te diferencie del resto.

¿Cómo será dentro de unos años?

Estamos ante un proceso de inflación académica, y como todas las burbujas, acabará explotando por algún lado, digo yo.

Aquí os dejo mi crítica al sistema educativo actual y el cómo las escuelas matan la creatividad.

Nota: En este post escribo únicamente mi experiencia. Yo he estudiado Ingeniería Industrial en Sevilla, de los cuales, seis meses de ellos han sido en Brasil. Puede que no sea lo que tú hayas vivido, ya sea por ser una universidad diferente u otra carrera que no tenga nada que ver con la mía. Como no me gusta hablar por hablar, voy a escribir una serie de propuestas para cada punto en concreto 🙂

También, comentar que no tengo nada en contra de los profesores, ni mucho menos. Muchos de ellos han aportado para ser como soy hoy en día, y además, me he llevado grandes amistades. Hacen una gran labor, que no se les reconoce como debe, pero me temo que son presos de este sistema el cual necesitamos cambiar cuanto antes.

1.- Deberíamos tener desde pequeños asignaturas importantes sobre la vida

Existen asignaturas absurdas o temarios inútiles que no tienen utilidad alguna, por lo menos, desde el enfoque que se imparten estas asignaturas.

Y me refiero por igual al colegio/instituto como a la universidad.

¿En qué cabeza cabe un ingeniero tener que dar Ciencias del Mundo Contemporáneo (Biología de 4º de eso) en bachiller en vez de Química o Dibujo Técnico?

¿O empezar a impartir francés durante 4 años en la Eso para después dejarlo olvidado por completo en bachillerato?

Todo este tiempo podrían dedicarlo a enseñar conocimientos que nos sirvan en la vida real, en nuestro día a día.

La mayoría de las personas cuando acabamos nuestra carrera y salimos al mundo laboral, pecamos de:

  • Hablar en público: en 4 años de carrera no he hecho ninguna exposición, en cambio, en Brasil he realizado seis en cinco meses.
  • Política: ¿Cuántos españoles votan a un partido sin haber leído su programa electoral?
  • Gestionar nuestro tiempo y ser más productivos: uno de los mayores problemas que nos enfrentamos cuando entramos en la universidad o al salir al mundo laboral.
  • Saber gestionar nuestro dinero de forma inteligente: tenemos un grave problema de finanzas personales. Creo que es algo básico que se debería enseñar en la escuela y no tener que aprender a través de libros de Robert Kiyosaki.
  • Gestión de toma de decisiones: otro problema real en nuestro día a día desde que somos pequeños.
    Si no lo crees, piensa en cuantas personas de tu entorno se han cambiado de carrera.
  • Cómo trabajar en equipo: nuestra educación se fomenta en un clima competitivo, donde si yo gano, tú pierdes. Cuando llegas al mundo laboral, lo primero que tienes que hacer es trabajar en equipo, y crear relaciones win-win. ¿Un poco contradictorio, no?
  • Marketing y ventas: sin duda, creo que son materias esenciales tanto para un ingeniero, como para un filólogo, por lo que se deberían impartir, al menos, como optativas.

Propuestas

  • Fomentar el trabajo en equipo. Evaluar actividades grupales (pero no con notas individuales), deberían prepararnos para cuando salgamos ahí fuera.
  • Reestructurar un poco las asignaturas desde la base. Dar la opción a tener materias útiles que realmente nos sirven en nuestro día a día, en vez de algunas que debido a todos los cambios que se están produciendo, ya no las necesitamos. (Ejemplo: aprenderte los ríos y afluentes de África o todas las obras literarias y fechas de cada autor. Principalmente, lo digo porque si el objetivo es aprenderlos, la mayoría de nosotros ya no nos acordamos).
  • Obligar a todos los estudiantes a hablar en público, que vayan perdiendo el miedo. Ya sea a través de exposiciones, trabajos o cualquier tipo de actividad (vuelvo a insistir, a lo mejor en tu carrera lo hacen, pero estoy hablando desde mi experiencia personal).

2.- Nos castigan por cometer errores, el mayor motivo por lo que las escuelas matan la creatividad

Te hacen creer que eres mejor o peor por seleccionar una «a» o una «b» en un tipo test.

Tenemos miedo a equivocarnos, a quedar mal. Nos hacen ver que no debemos comenzar algo si no estamos al cien por cien preparados.

¿Cuándo has comentado alguna vez en alto sin tenerlo completamente seguro?

Cada error que cometemos, nos lo penalizan.

Cuando intentas responder una pregunta, si lo haces mal, tienes un negativo.

Cuando fallas en un examen, te restan puntos.

Sin embargo, se quiere fomentar la participación en clase cuando nuestro mayor miedo es el error.

¿Un poco contradictorio, no?

Si no estás abierto a equivocarte, nunca vas a crear algo original, dijo Ken Robinson.

La cruda realidad es que la mayoría de los niños han perdido esa capacidad, y lo peor es que ya no solo los niños…

Hemos llegado a un momento en el que te califican de inteligente dependiendo de tus habilidades académicas…

Picasso dijo una vez: “Todos los niños nacen artistas, el problema es seguir siendo artistas al crecer”.

El gran problema es que muchas personas talentosas, brillantes y creativas piensan que no lo son, porque simplemente, no se le dan bien las matemáticas o la geografía.

Como bien dice al inicio del vídeo de Prince Ea: “Todo el mundo es un genio, pero si juzgas a un pez por su habilidad para trepar un árbol, pasará toda su vida creyendo que es un inútil”.

Me hace mucha gracia cuando un profesor da algo por sabido y sin embargo, no tenemos ni idea de lo que nos intenta decir.

Cuándo nos pregunta y no sabemos que contestar, nos toma como inútiles o tontos… «¿De verdad no sabéis esto?»

No me ha pasado ni 1, ni 2 veces… y es muy triste.

Propuestas

  • Incentivar las participaciones, premiando a aquellos que den un paso hacia delante. Realizar cuestiones que no tengan una sola respuesta, cuestiones que incentiven la creatividad y el razonamiento por parte del alumno y mucho menos, calificar negativamente si tiene poca coherencia la respuesta. Estamos para aprender, ¿o a caso nunca te caíste alguna vez cuando aprendiste a montar en bicicleta?
  • Realizar ejercicios para aumentar nuestra creatividad, y poder desarrollar al máximo nuestros propios recursos.
  • Intentar calificar de otra forma, que no sea todo o nada. Simplemente, evaluar el esfuerzo, la coherencia y las justificaciones de las respuestas (también dependerá de la asignatura claro está). Obviamente, los exámenes creo que son necesarios, pero… ¿y si predominara el aprender al sacar buena o mala nota? ¿Y si no tuviésemos exámenes, y en cambio, tuviésemos que crear cosas o realizar trabajos? Este punto creo que es una de las ideas en las que deberíamos de guiarnos en un futuro.

3.- Estudias para aprobar el examen y no para aprender

¿Cuántas veces ha acabado el examen, ha pasado una semana y se te ha olvidado todo?

¿De qué sirve entonces matar neuronas en aprender una cosa que no tiene ningún fruto después?

Estamos llegando a un momento que la mejor estrategia para tener éxito académico es saber lo que pide el profesor y dárselo. Independientemente de lo que creas tú conveniente.

Te pongo ejemplo que me pasó hace unos años:

Me quitaron una pregunta entera en Matemáticas (teniendo el resultado bien) por haber resuelto el problema por la cuenta de la vieja (cuando en el enunciado no te especificaba qué método tenías que utilizar).

¿Cuál fue el argumento del profesor?

Lo tienes mal porque así no es como lo he enseñado en clase.

Y esa es la pura realidad hoy en día…

Se estudia para pasar un examen y no para aprender.

¿Cuántos años has estado estudiando inglés? ¿Cuántas horas le has dedicado?

¿No crees que han sido suficientes para saber al menos dominar un poco el idioma? ¿Salen los jóvenes con 18 años hablando inglés?

¿Cuántos años nos han impartido Lengua española? ¿Cuál es la realidad?

La mayoría de nosotros salimos de bachiller sin saber comunicarnos, expresarnos o hablar en público.

El sistema educativo actual debe cambiar y esta es una de las facetas que más problemas tiene. La enseñanza que se imparte debe estar enfocada a la práctica, y siempre cumplimentar la teoría con la práctica.

De nada sirve teoría, teoría y más teoría si después no lo reflejamos en la realidad, o no lo aplicamos para nada. Como la mayoría de las cosas que he ido «aprendiendo», se acaban quedando en el olvido.

La triste realidad es que en el momento que estudias un grado por tener el título en vez de para aprender, se va todo al garete.

Propuestas:

  • Proponer ejercicios prácticos y reales que tienen las empresas donde cada alumno tenga que resolver un problema y justificarlo. Se evaluaría en función de la coherencia y de su justificación. Más o menos, sería como un ejercicio de Brainstorming. Ayudaría a aumentar la creatividad y la capacidad resolutiva de los alumnos (cosa que no se le olvidan cuando pasa una semana).
  • Redefinir los objetivos de cada asignatura. Está claro que el problema existe. En el caso del inglés, no se puede empezar por el verbo «to be» todos los años. Fomentaría las conversaciones, listening y situaciones reales (trayendo personas nativas si es posible).
  • Aplicar la ley de pareto. En la mayoría de las asignaturas que he impartido, el 80% es morralla, y al final solo necesitas aprender el 20%. Lo que haría sin duda es dar ese único 20% en condiciones, o dar una asignatura enfocada a la utilidad, y no meter tantas tonterías como suelen ocurrir a veces (solo sirve para liarnos más y para perder nuestro tiempo).

4.- Creen que todos vamos a ser investigadores

La mayoría de los profesores que he tenido en la unviersidad han sido investigadores y nunca han trabajado en una empresa (por no hablar, de que ser inteligente no significa saber enseñar).

Está muy bien para ser investigador, pero la realidad es que eso es un mínimo de todas las personas que estamos estudiando.

De modo que, el objetivo se supone que es prepararte para trabajar y la única realidad es que existe una desconexión total entre el mundo laboral y la universidad.

Se imparte demasiada teoría, que al final ni aprendes, cuando podrías sacar más provecho de casos útiles y prácticos que realmente te servirían en un futuro.

Después, salimos al mundo laboral y nos comemos los mocos, porque ni tenemos experiencia, ni nos la han impartido.

Hace una semana, me puse de mala leche al ver que tenía que estudiarme esta fórmula para el examen (y como esta, 50 más)

como la educación mata la creatividad

Aún no encuentro la respuesta, así que si le ves una explicación, por favor, cuéntamelo.

¿O es que perderás tu trabajo por no saberte esa fórmula en un futuro?

¿No sería más fácil que te enseñen a usarla y te la pongan como dato en el examen?

Las cosas han cambiado y el sistema educativo actual debe saber adaptarse para no matar la creatividad de esta forma tan horrible.

Propuestas

  • Menos memorizar y más ejercicios prácticos donde realmente apliques lo aprendido y no, que lo único que hacemos es escupirlo como puedes durante el examen (tan fácil como dejar los apuntes en el examen).
  • Ver más casos prácticos con personas que tengan experiencia en ese campo. No es lo mismo que te enseñe alguien que lo ha vivido a que no.
  • Crear ramas de los grados que profundicen en aquellos que vayan a dedicarse a la investigación, o realizar un doctorado. La realidad dice que este número es un mínimo de todos los alumnos, mientras que el plan educativo solo está enfocado para estos alumnos.

5.- Salimos con una mente cerrada y sin experiencia laboral

Lo primero que nos piden al salir de la universidad es tener una experiencia laboral, entonces, ¿por qué no cambiamos eso?

Ahora solo existen prácticas durante el último año y voluntarias… y por llamarlo prácticas. Algunos amigos han estado pasando datos a un Excel, o incluso, sirviendo cafés.

Es la cruda realidad.

Otro tema que es real… te piden un nivel alto de inglés para poder tener el título (B2), cuando no te han enseñado absolutamente nada.

Al final, siempre es la misma historia. O te buscas las habichuelas por tu cuenta, o estás perdido.

Propuestas

  • Realizar prácticas obligatorias en empresas (que sirvan) y no solo durante el último año.
  • Exigir haber estudiado al menos seis meses en otra universidad fuera de tu ciudad, si es fuera y con inglés mejor (Requeriría una inversión).
  • Tener contacto con el mundo laboral desde el primer día que empiezas la universidad.

Conclusión

Creo que debemos darnos cuenta de que existe un problema en nuestro plan educativo y hacer una remodelación desde la base.

Ya no necesitamos alumnos obedientes como al acabar la Revolución Industrial.

Necesitamos personas creativas.

El mundo ha cambiado, la globalización es un hecho.

Grandes genios como Steve Jobs o Bill Gates no acabaron sus estudios. Google está empezando a cambiar su sistema para contratar puestos de trabajo, donde cada vez tiene menos importancia el expediente académico.

Tenemos toda la información que necesitamos a solo un click de ratón, ya no tenemos que memorizar todo lo que había que hacerlo antes.

Por lo tanto:

  • Deberíamos fomentar la práctica, la creatividad, cambiar la forma de ver las cosas. Aplicar lo aprendido y no escupir en el examen.
  • Saber definir un problema. Estamos acostumbrados a resolverlos, pero llegamos al mundo real y a veces no sabemos ni que existe un problema. Tenemos que encontrarlo y a partir de ahí, buscar soluciones para resolverlo.
  • Fomentaría la FP (en países como Finlandia es tan importante como estudiar una carrera). Aquí tenemos una mentalidad atrasada, en que solo se estudia FP si no te llega la nota para estudiar un grado, y no debería ser así.
  • Buscar aprender por encima de tener buena o mala nota. La vida es un constante aprendizaje, y al fin y al cabo, eso es lo que nos va a dar de comer en nuestro día a día.

Y nada, sé que es solo un esbozo, pero creo que es por donde deberían ir los tiros.

Y si no, pues oye, después de 3000 palabras, me he quedado la mar de a gusto 😉

Si seguís interesado, aquí os dejo dos artículos en los que me he inspirado:

Cómo la universidad mata el espíritu emprendedor de Ángel Alegre, o nos educan para ser mediocres de Más y Mejor. También puedes ver esta clase gratuita de Ángel donde nos da las herramientas para encontrar un trabajo que te haga feliz en este nuevo paradigma laboral al que nos enfrentamos.

Aunque sin duda, lo mejor ha sido este vídeo del por qué la educación mata la creatividad de Ken Robinson en las Charlas TED. El inicio de las escuelas creativas.

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¿Cuál es tu experiencia con el sistema educativo actual? ¿En qué aspectos cree que debería mejorar?

¡Cuéntame tu opinión en los comentarios! Creo que puede haber un buen debate 🙂

Y si piensas que puede ayudar a alguien más con esta crítica, ¡compártelo en las redes sociales!

10 comentarios en «5 motivos por los que el sistema educativo nos convierte en zombis»

  1. Una vez leído, no puedo estar más de acuerdo.

    He tenido que enlazar tu artículo en mi entrada sobre la educación, así como los otros dos que mencionas al final (los desconocía).

    Me encanta conocer gente que opina diferente a los demás sobre este sistema educativo obsoleto y descuadrado.

    ¡Un abrazo!

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    • ¡Me alegra que te haya gustado Javier!

      Muchas gracias por comentar, tienes toda la razón del mundo, necesitamos un cambio en el sistema educativo ya. Dejar el politiqueo a un lado y poner el foco en las nuevas generaciones para ver qué puede ser lo mejor para ellos.

      Un saludo y encantado de verte por aquí de nuevo 😉

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  2. Joder Jesús, que pedazo de artículo te has marcado ¿no?
    De verdad que no puedo eataras de acuerdo. El sustantivo educativo por lo general nos prepara para bien poco y a veces, como te pasa a ti que has estudiado en Brasil te das cuenta de que en aquellos sitios en los que consideran que la educación es de peor calidad (llamemoslo así) implementan una serie de valores y estrategias de enseñanza mucho mejores. Yo estudié unos años en México y tengo esa sensación.
    Por otro lado la titulitis que existe es brutal. No soy nada partidaria de esto, creo que es absurdo medir una aptitud de esta manera. Hace años me sentía orgullosa de estar estudiando una carrera, pero es cierto que cuando terminas el panorama es un tanto desolador y lo peor es que solo algunos cambiamos el chip y nos damos cuenta de esto.

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    • ¡Hola Paloma!

      Me alegro de que te haya gustado. Exactamente, te sientes muy afortunado y muy bien de estudiar una carrera hasta que cuando terminas (en la mayoría de los casos) ese título vale más bien de muy poco. Ahora te piden un máster mínimo más dos idiomas jajaja. No sé cuando va a parar esta titulitis, pero en algún momento tendrá que explotar.

      Un fuerte abrazo y gracias por comentar 🙂

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  3. Uf Jesús, tremendo artículo y no puedo estar más de acuerdo. Empecé a darme cuenta de cómo está establecido el sistema educativo tradicional mientras trabajaba en un colegio como teacher de inglés. Eso de tener a los niños sentados por tanto tiempo, obligados a estar escuchando al profesor sí que no funciona ya. Tal vez funcionaba en otras generaciones, pero ya la humanidad ha evolucionado y por tanto ya no aprendemos como antes. Luego de dejar ese trabajo en el colegio empecé a investigar acerca de lugares con una educación no convencional, como lo hacen en Finlandia, y comencé a apasionarme por este tema.

    Incluso, llegué a trabajar en una academia de inglés para niños donde me enamoré del método educativo, por su manera tan dinámica, divertida y creativa de enseñar. Esto me hizo darme cuenta que en un futuro quiero poder aportar a la educación no tradicional, una que se le permite a los niños ser libres y que se promueva la creatividad y sus intereses.

    Este post me ha inspirado a escribir un artículo sobre el tema, pero mientras tanto, lo comparto con mi comunidad.

    Muchísimas gracias, me encanta encontrar personas que piensan igual que yo. Es un placer 🙂

    ¡Un fuerte abrazo!

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    • Hola Gaby!! Qué alegría verte comentar.

      Estoy completamente de acuerdo. Tú lo has vivido desde el lado del profesorado y sinceramente me alegra saber que el profesorado también opina de este modo. A veces creo que son simples esclavos del sistema.

      La verdad es que se ha quedao un poco anticuado. Debemos pensar más en crear y aprender y menos en memorizar y escupir.

      Sabía que en Finlandia se llevaba una educación más moderna, pero no he tenido el placer de vivirla ni he podido informarme a fondo. Estoy a la espera de ese artículo y muchas gracias por comparirlo 🙂

      Un abrazo

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  4. Hola Jesús! Voy a darte mi opinión respecto al artículo.
    Creo que tienes razón en muchos puntos (nos enseñan a memorizar y no ha desarrollar nuestra mente), pero no estoy de acuerdo con las propuestas que has dado o, al menos, de la forma en que las has propuesto.
    – Las prácticas en empresa son un problema que, parece ser, nadie quiere ver. Estamos en empresas que en la mayoría de los casos se aprovechan de nuestro trabajo, ya sea para hacerles el trabajo sucio o acercarle un café al listo de turno. Son necesarias, si, puesto que nos acercan al mundo laboral, pero ya que damos un servicio a una empresa (en la mayoría de los casos), creo que se debería buscar una forma de remunerar dichas prácticas, pues al final estamos trabajando gratis para personas que después, en la mayoría de casos que conozco, ni si quiera te tienen en cuenta para ofrecerte un trabajo.
    – La estancia mínima de 6 meses en un país extranjero sería genial, pero irreal, al menos hasta que cambie el sistema. Sabrás, como yo, que una gran parte del alumnado no puedo ni tan siquiera costearse aquí la carrera, cuanto menos allí. También hay muchas personas que están trabajando o tienen a su cargo a familiares, por lo que también sería imposible realizar dicha estancia.
    – El contacto con el mundo laboral desde el primer día no lo creo necesario. Hay que preparar para eso, si, pero no creo que para dicha preparación sea necesaria la dependencia de una empresa u otro sector. Creo que con eso caeríamos en la mercantilización, aún más, de la educación.

    Desde mi punto de vista, estudiar una carrera debe ir mucho más allá de la salida que pueda darte. Tenemos que escoger lo que nos guste y sobre todo lo que queramos aprender, pero claro, si partimos de la educación que tenemos como base en la que se nos enseña a memorizar y nos iguala con todas las personas, sin hablarnos de equidad (un pez no puede trepar un árbol), obtendremos los mismos resultados siempre. Creo que viene una generación de profesorado que ayudará al cambio de la educación, ya que solo cambiando la base podremos incidir después en las enseñanzas universitarias, por ejemplo. Aunque no todo el trabajo esté tanto en el profesorado como en el sistema educativo del que dependen, así que con el granito que pongamos cada persona seguro que conseguimos grandes cosas.

    Esto no deja de ser mi opinión personal. Coincido en muchas cosas del artículo contigo y creo que te lo has currado bastante, tanto en este como en los demás. Enhorabuena Jesús.

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    • ¡Hola Ana!

      Vaya pedazo de comentario, y no sabes cuanto me alegro verte por aquí jeje 😉

      – En el primer punto estoy completamente de acuerdo contigo. Cuando pongo la coletilla (y sirvan) es porque muchos de mis amigos desperdician las horas pasando datos a un excel, o haciendo tareas que no les favorecen en nada (y lo peor aún, gratis que es como dices). Mi propuesta va enfocada a prácticas de verdad. Puedo llegar a entender que no sean remuneradas si aprendes de verdad y son convalidables por x créditos, dos asignaturas por ejemplo (al fin y al cabo, son horas de aprendizaje práctico). Creo que llegamos a un acuerdo que el modo en el que se están utilizando las prácticas debe cambiar jeje.

      – En el segundo punto, concuerdo contigo de que para hacer posible eso, tendrían que cambiar mucho las cosas. Pero también creo, que en un mundo globalizado como en el que estamos, realizar un viaje así es fundamental para el futuro laboral. Sinceramente, creo que serían becas mejor empleadas que por ejemplo, devolver el dinero por los créditos aprobados (y no favorecer la excelencia) como está impuesto actualmente en Andalucía. Muchos (como tú y yo) somos de fuera de donde estudiamos, y el dinero que nos tenemos que gastar es hasta menos de lo que nos gastamos en Sevilla (por ejemplo yo en Brasil y sin contar la beca). Obviamente, habría excepeciones, sobretodo por el tema de cargos familiares.

      – En el tercer punto, creo que lo que se entiende por universidad hoy día es por prepararte para obtener un empleo. Es triste, porque no debería ser así, pero creo que es la realidad.
      ¿Qué es lo peor de todo? Que fracasan en su misión de tener un empleo, porque el paro juvenil está por las nubes y los estudiantes necesitan tener 3 máster para poder encontrar un empleo (y encima, que no tiene nada que ver con lo que ha estudiado). Por eso mismo, creo que hay que mantener un contacto con la realidad. La universidad está metida en una burbuja y cuando sales, te das cuenta con lo que hay ahí fuera. A lo mejor me he expresado mal, pero mi idea con el estar en contacto con el mundo laboral es también por ejemplo que te enseñen a hablar en público, a trabajar en equipo o a ser más productivos con tus estudios. Cosas que ahí fuera te van a servir. O que todo lo que des, realmente sea práctico (también dependerá de la carrera), pero sinceramente creo, que sin aprendizaje práctico no hay aprendizaje.

      Estoy completamente de acuerdo contigo en la conclusión (aunque sea una pena que la universidad ahora mismo no es eso), y espero que los profesores sean los que cambien este paradigma en el que nos estamos metiendo.

      Muchas gracias y a ver cuando nos vemos 🙂

      Un fuerte abrazo!

      Responder
  5. Vaya no puedo estar mas de acuerdo en este articulo, estoy cursando el bachillerato y a veces he tenido ese tipo de pensamientos (creia que era solo buscar excusas o pretextos para no esforzarme) pero conforme fui investigando me di cuenta que mi ideologia no es erronea y eso me da cierto alivio.
    Excelente trabajo y dedicación al articulo.
    ¡Saludos!

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