El único secreto para tener buena suerte en la vida

En el primer post de esta mini serie estuvimos debatiendo si existe la suerte o no. Reflexionamos acerca del azar y llegamos a la conclusión de que los resultados de nuestras acciones dependen de un factor nuestro y otro externo.

Más o menos la fórmula quedaría así:

B=A*X

El resultado (B) dependía de nuestras acciones (A) y del factor suerte (X).

Tener suerte nos afecta en la manera de que hay situaciones en las que el factor X es incontrolable y se desprecia la opción A (como haber nacido yo en Sevilla, por ejemplo).

En otras situaciones, el factor X es menor, pero aun así, seguiremos sin saber a ciencia cierta cuál será el resultado de nuestras acciones.

Puse el ejemplo de un examen, que por mucho que estudiara (aumentara el factor A), suspendí 3 veces seguidas.

Vivimos en un mundo muy complejo en el que todo está interconectado entre sí, y un mínimo cambio en la punta más escondida de este planeta, puede generar un efecto en cadena brutal que afecte a cada uno de nosotros.

Por lo tanto, una buena parte de nuestra vida depende del azar, si tenemos mala o buena suerte.

La suerte también te afecta a ti

Quieras o no, la suerte también te afecta a ti y tendrás que actuar de la manera que puedas aumentar las probabilidades para tener buena suerte en la vida.

Si ignoras este hecho, tarde o temprano, te llevarás una gran bofetada.

Habrá situaciones en el que la suerte no se ponga de tu parte y por mucho que hagas, no obtendrás los resultados deseados.

Por lo tanto, voy contarte mi experiencia descifrando los diferentes patrones que he descubierto para tener suerte.

1.- Crea un sistema.

Uno de los requisitos para tener éxito en esta vida es crear un sistema que consista en:

  • Realizar actividades que tengan la máxima probabilidad de producir el resultado que te interesa.
  • Repitiendo esas actividades.

Por ejemplo, ¿recuerdas el Barcelona de Guardiola?

Él fue capaz de crear un sistema a base de trabajo y esfuerzo para direccionar al equipo en una misma dirección.

¿Ganó todos los partidos?

Efectivamente no, el Barcelona aumentaba la A (acciones que dependen de ellos), pero había un factor X que en este caso correspondía a la suerte y a lo que hiciera el otro equipo.

Sin embargo, ganó la mayoría de los partidos y acabó la temporada con 6 títulos más.

¿Por qué ocurrió esto?

Porque aunque perdiera, el equipo repetía el mismo sistema que realmente funcionaba.

Que una, dos o tres veces no saliese bien, no quería decir que tuviesen que cambiar de entrenador, que cambiaran la forma de juego o que lo que hacían era incorrecto.

2.- Aplica el método de la mejora continua al sistema

¿Qué le pasó al Barcelona cuando pasaron unos cuantos años?

Los jugadores fueron saliendo (Xavi, Puyol, etc) y el equipo decayó. El resto de equipos ya tenían calado el sistema del Barcelona y ahora no quedaba otra que regenerar y actualizar.

El objetivo en este punto es saber identificar qué acciones han salido mal por culpa nuestra, y cuáles por tener mala suerte.

Poco a poco, debemos ir corrigiendo aquellas acciones que en las que hemos actuado mal.

Si hacemos esto una y otra vez, iremos aumentando nuestras probabilidades de tener suerte.

Al fin y al cabo, es ir creciendo y mejorando continuamente.

como tener suerte en el dinero y en los juegos de azar

3.- Ponte en situaciones en las que sea más lo que se puede ganar que lo que se puede perder

¿El objetivo es atraer la buena suerte verdad?

Por lo tanto, este punto número 3 es una de las claves más importantes que en muchas ocasiones pasamos por alto. Te voy a poner dos ejemplos:

“Javier, de unos 40 años y una familia, llega a casa contento de alegría porque había conseguido ganar 10.000 euros en un solo día. No había sido ni en la lotería, ni en el casino, pero obviamente, tenía su truco (había participado en un juego que me acabo de inventar).

El juego consistía en tirar dos dados. Si caía un número diferente a 7, ganaba 10.000 euros, en caso contrario, los jueces del juego debían quitarle la vida.

Por pura estadística, las probabilidades de salir sin vida eran tan solo un 8,33 %. Como era lógico, el dado cayó en distinto de 7, y salió de allí súper contento con sus 10.000 euros en el bolsillo.

Javier se lo comentó a varios amigos que tenían problemas de dinero (Juan, Pedro y Antonio). Juan y Pedro sacaron un 1 y un 10, por lo que volvieron a casa con sus 10.000 euros también.

Sin embargo, Antonio sacó un 7.

Lo que parecía una ganga y de lo que todos estaban festejando se volvió una tragedia.”

Ahora, te voy a contar esta otra historia.

“Jesús es un estudiante que tiene clara cuál es su visión en esta vida. Ha creado un sistema para crear nuevos proyectos. En total lleva 4 ya (2 de ellos fracasados completamente). Los otros dos son un blog llamado Libres Viajeros y una página nicho que está comenzando a funcionar.

En vez de pasar horas viendo la televisión o perdiendo el tiempo, se dedica a leer, aprender y a iterar sobre este sistema.

Sus pérdidas son muy pocas. Lo único malo que podría pasar es haber perdido el tiempo en todos sus proyectos (cosa que es difícil, ya que ha aprendido mucho y sacado lecciones muy importantes de ellos), de modo que de alguna forma ya está recompensado.

Aun así, confía en tener un golpe de suerte a base de constancia y que algún día, uno de esos proyectos se conviertan en un pelotazo.”

Como habrás deducido, la primera historia es inventada completamente. La segunda, es mi historia.

Podemos extraer varias lecciones de ambas historias:

1.- Nunca permitas la opción de quedar fuera del juego. Aunque la primera historia sea inventada, hay situaciones en la vida en la que arriesgamos un porcentaje a que ocurran cosas en que lo perdamos todo completamente. Por ejemplo: no hacerle una copia de seguridad a tu portátil, no contratar un seguro de viaje, tener un empleo donde gastas todos tus ingresos conforme los vas ganando (no ahorras) o incluso invertir tus ahorros sin conocimientos y sin tener un colchón de seguridad.

Todas estas situaciones pueden salir bien (en la mayoría de los casos diría yo). Pero con que una vez solo salga mal (te roben el ordenador, tengas un accidente durante el viaje, te despidan de tu trabajo o la bolsa vaya en tu contra) terminas por completo fuera del juego.

2.- Aunque el resultado sea favorable, una mala decisión seguirá siendo una decisión estúpida. Te he puesto este ejemplo tan dramático para que te quedes con la parte constructiva.

Aunque Pablo haya ganado 10.000 euros, ¿no te parece estúpido haber jugado su vida a los dados?

En la vida real nos sometemos continuamente a este tipo de situaciones. No es hasta el momento en el que la mala suerte se topa contigo y ocurre algo malo cuando te das cuenta de esto.

Además, por lo “cool” que somos, las personas piensan que la culpa es del estado, de los bancos que te han ofrecido el crédito, del amigo que te dijo que invirtieras en tal empresa, de que los jefes abusan de sus empleados, del paro, o simplemente, de que ha sido mala suerte.

Cuando la única realidad es que no estamos haciendo las cosas bien.

Si gastas por encima de tus posibilidades o te endeudas hasta las trancas, no te quejes si te echan del trabajo y entras en bancarrota.

El mundo es así, nadie te debe nada y eres tú el único que tienes que actuar con cabeza y protegerte ante este tipo de situaciones.

Lo difícil y que más nos cuesta es saber identificar este tipo de situaciones cuando las estamos viviendo. Una vez que ha ocurrido la tragedia, te das cuenta de ello… pero antes no es tan fácil.

Para ello es tan sencillo como preguntarte una cosa.

¿Cuál es el coste de que ocurriese de forma diferente?

Por ejemplo, ¿cuál es la probabilidad de que ocurra de forma diferente a lo que esperas?

Si tú quieres vivir toda tu vida de un empleo en una misma empresa y no tienes ahorros para cualquier imprevisto. ¿Cuál es la probabilidad de que te despidan, o de que ocurra algo que te afecte negativamente?

Intenta no evaluar solo los resultados de tus acciones, sino el resultado medio de esas historias alternativas.

Recuerda que los ganadores son los que escriben la historia, tienes que saber identificar las veces que puedes perder y así descifrar las trampas del azar.

3.- La tercera lección que quería compartir contigo es que acudas a las matemáticas (no te asustes, te las voy a explicar de forma sencilla).

Para tomar mejores decisiones no solo debes valorar la probabilidad de los sucesos, sino que también debes tener en cuenta el impacto.

Te cuento otra historia 😉

Pedro es agente de bolsa.

Tras varios estudios anuncian que el mercado tiene unas 70% de posibilidades de subir, y por lo tanto, un 30% de bajar. Tras llegar a un consenso todos los agentes de bolsa de la empresa deciden invertir a la alza (que el mercado sube), mientras que Pedro, se niega y dice que prefiere hacerlo a la baja.

Todos se pusieron en contra de Pedro ya que era lógico invertir a la alza (tenía un 70% de probabilidades de acertar, o lo que es lo mismo, de cada 10 veces, acertarían 7).

Pero él se negó y sacó sus propias conclusiones.

Si el mercado baja, lo hará de forma contundente ya que nadie se lo espera. Si el mercado sube, lo hará muy poco.

Imagínate que si baja ganamos 1.000 euros y si sube ganamos 100.

Entonces, decidió poner un límite por si efectivamente se equivocaba y el mercado subía (perdería muy poco dinero), y en cambio, si bajase, se llevarían el pelotazo.

Este límite es de 50 euros por motivos de la empresa. Cuando en una operación se llega a pérdidas de esta cifra, automáticamente se cierra.

Según las matemáticas el resultado esperado si se apuesta a que baja (1000*0.3-50*0.7)  son de 265 euros.

Si apostamos que sube serían (100*0.7-50*0.3) de 55 euros.

Al cabo de 10 operaciones iguales, el resultado de invertir a la baja serían de 2650 euros, mientras que a la alza serían 550 euros.

Efectivamente, Pedro tenía razón. Aunque se perdiera más veces de las que se ganaba, los resultados salían con beneficios.

La lección que aprendemos de la historia de Pedro es que no solo debes tener en cuenta las probabilidades, sino también el impacto de esos sucesos.

Puedes asemejarlo a mi historia también si lo entiendes mejor. Las probabilidades de que el pelotazo llegue son pocas.

Pero a base de repetir el sistema aumento esas probabilidades y si ocurre, el valor del impacto sería incalculable.

para tener suerte en todo

4.- Prepárate para cuando llegue el momento de tener suerte en la vida

Aquí va otra historia jeje, hoy me estoy colando 🙂

“Javier lleva 5 meses buscando trabajo con ahínco, pero no se le encuentra ninguna oportunidad. No deja de preguntar por todos lados, tanto amigos como a negocios particulares directamente.

Un día, un amigo le comenta:

“Javi, conozco a un amigo que se llama Cristóbal, está montando una pequeña start-up y me comentó que necesitaba una mano. Acudió a mí, pero estoy muy liado con mi negocio, así que te recomendé porque sé que estás buscando trabajo”.

A Javier le pareció increíble y tuvo la reunión con Cristóbal.

Toda la reunión fue a pedir de bocas, le ofreció el puesto y cuando estaban terminando, Cristóbal le dijo que tendrían una primera entrevista en inglés con su cliente.

Fue entonces cuando todo se derrumbó de nuevo (la buena suerte se había convertido en mala suerte). Javier no sabe hablar inglés, por lo tanto no podría optar al puesto.”

La lección más importante que podemos sacar de esta historia es que debes estar preparado para cuando el momento se presente.

Y no me refiero a aprender inglés únicamente, me refiero a cualquier habilidad que puedas desarrollar y sea tan importante.

Hay una frase que me marcó de Scott Adams en su libro que fue:

“Cualquier habilidad nueva que adquiera, se duplicarán tus probabilidades de éxito”.

Saber una nueva habilidad, aumentará considerablemente la A de tu fórmula de resultados y disminuirá en gran medida el papel de la suerte.

Para Javier, lo que se había convertido en una oportunidad increíble, se le había escapado por no estar preparado.

Si en el momento que pasa el tren, aún no has llegado a la estación, lo habrás perdido para siempre.

Por lo tanto, no me queda otra que decirte que…

¡Invierte en ti!

  • Aprende inglés. Los anglosajones nos llevan años luz de distancia en cuanto a aprendizaje e innovación. Si quieres enterarte de las novedades y ser el primero en tu nicho de mercado, necesitas saber inglés. Si viajas por el mundo, lo necesitarás para poder comunicarte. Si quieres optar a cualquier empresa que trabaje con clientes fuera de España, ya necesitas el inglés. Es muy importante, así que no lo dejes más. Puedes empezar a estudiar por tu cuenta y obtener grandes resultados (ya te comenté como aprendí a hablar portugués en 3 meses). Yo por ejemplo, intento escuchar todos los días algunos podcasts en inglés, como el de Nat Eliason o el de Pat Flynn, además de leerme tres libros cada mes.
  • Mejora tu habilidad de hablar en público. A la mayoría de nosotros nos cuesta hablar en público. A mí por ejemplo, me daba pánico salir a la pizarra cuando estaba en clase. Sin embargo, la única forma de superarlo es haciéndolo una y otra vez hasta que llegue el momento en el que te sientas cómodo. Cuanto antes empieces a practicar este tipo de situaciones, antes lo dominarás 😉

Por ejemplo, cuando empecé las entrevistas, se me ve muy nervioso delante de la cámara. Pensar que te estás grabando y que después tú lo verías era acojonante. Sin embargo, conforme van pasando los episodios se comprueba que voy estando más suelto y que voy cogiendo confianza.

  • Aprende a escribir. Otro grave error que tenemos la mayoría de nosotros. Tenemos un gran problema en cuanto a expresión escrita (y ya no digo por faltas de ortografía), sino porque no se nos entiende. Te aconsejo que comiences a escribir en una libreta todos los días unas 500 palabras (lo primero que se te venga a la cabeza, esto no es importante) y verás cómo esta habilidad va mejorando. Los primeros artículos de mi blog los corregía 100 veces antes de publicarlo porque no se entendía del todo bien, o no me explicaba de la forma que yo quería. Ahora, he reducido el tiempo de escritura 10 veces, y además, creo, que se me entiende mejor.
  • Aprende sobre marketing y ventas. Ya seas un camarero, un jefe de negocios o un traductor, deberías saber sobre marketing y ventas. La vida consiste en vender soluciones a los demás, y si no sabemos cómo hacerlo, vamos muy mal. Cuando comencé este blog, tenía un miedo horrible a vender porque tenemos una mala creencia infundada sobre esta palabra. Sin embargo, vender es solucionar problemas y ayudar a los demás.
  • Persuasión. Muy relacionado con el anterior punto. La vida consiste en persuadir y convencer a los demás, y saber hacerlo de la forma correcta podría indicar que vas a tener suerte hoy mismo por ejemplo.
  • Inteligencia financiera. Algo de lo que no nos enseñan en la escuela, y que tenemos que lidiar en nuestro día a día. Debemos saber manejar nuestro dinero, así que lo mejor en este aspecto es leer libros. Aquí puedes ver el resumen que hice de este bestseller de Robert Kiyosaki.
  • Trabajar en equipo. Aprende a cooperar con los demás. Durante los últimos años, las empresas se están dando cuenta de la importancia de esta habilidad y cada vez más lo requieren en los puestos de trabajo. Para ello, te recomiendo que juegues a deportes de equipo, sobre todo padel o al tenis de parejas. Aunque cualquier otro vale también 😉
  • Cuida tu cuerpo. A veces nos centramos en todo lo demás aspectos de nuestra vida, pero nos olvidamos del más importante, nuestra salud. Ten una dieta sana y haz ejercicio regularmente, te lo agradecerás a ti mismo ya que se beneficiarán el resto de partes de tu vida.

Aumentar tus habilidades hará que se multipliquen tus probabilidades de tener mucha suerte en todo.

5.- Crea una red de amigos.

Haz tu círculo de amigos.

No sabes la importancia que tiene esto para tener suerte.

En la historia de Javier, no se le hubiese presentado la oportunidad si su propio amigo no le hubiera recomendado.

Hay que tener claro que las personas prefieren tratar con personas conocidas, o amigos de amigos, antes que tratar con alguien nuevo.

Hacer amistades puede desencadenar una serie de sucesos que acaben terminando en un golpe de suerte en el trabajo  o en cualquier otro ámbito de tu vida, como en el amor, quien sabe.

6.- Aumenta tus probabilidades de éxito reduciendo al máximo el factor X.

Una de las cosas que me he dado cuenta mientras escribía este post (no tenía este punto metido en el índice), es que debemos reducir al máximo el factor X de la fórmula (la suerte).

Para ello, en la medida de lo posible debemos incluir al mínimo número de personas en la ecuación.

En el momento que incluyes a otra persona, el factor de la suerte se dispara ya que no está dentro de nuestro control, si no que depende de alguien más.

  • De que el profesor esté de buen humor y te ponga un examen sencillo.
  • De que la chica a la que buscas no tenga novio y además, tenga ganas de ligar contigo.
  • De que Amazon me cierre mi cuenta de afiliados y de buenas a primeras, me corte el chorro de mi nueva página nicho.

¿Me entiendes?

A veces es más fácil cambiar nosotros mismos y crearnos nuestra propia suerte.

Con esto no quiero decir que no incluyamos a las personas, ya he comentado antes la importancia de hacer un círculo de amigos. Simplemente, que no intentemos hacer que los demás cambien de ideas o que dependamos exclusivamente de los demás

La clave será en que cambies tú y te centres en las personas que piensan igual que tú.

Por ejemplo; si vendes un paraguas, no intentes convencer a personas que no les gusta llevarlo por la calle o que prefieren el chubasquero (tendrás altas probabilidades de tener mala suerte y vender muy pocos).

Cambia tu mentalidad y sal en busca de esas personas que sí quieren comprar tu paraguas. De este modo, atraerás la buena suerte.

¿Cómo tener buena suerte?  Conclusión final

En la vida creo que subestimamos el poder de la suerte. Tiene un papel muchísimo más importante de lo que creemos y quiero que tras leer este post te hayas llevado con algo aprendido hoy.

Eso sí, en ningún momento he dicho de que la suerte sea algo divino que te llega por arte de magia. Si no actuamos, ese momento de suerte nunca va a llegar.

Nuestro objetivo será maximizar las probabilidades de que ese golpe de suerte se tope en nuestro camino.

Por lo tanto, debes tener en cuenta lo siguiente:

1.- Nunca dar opciones a quedarte fuera del juego. Afianza siempre esto y que un golpe de mala suerte no se lleve con todo tu trabajo o tu vida.

2.- Invierte en ti mismo. Aprende habilidades nuevas continuamente.

3.- Crea un sistema. A la vez que mantienes seguro todas las áreas de tu vida, invierte algo de lo que no te cueste perder en oportunidades top. Por ejemplo, dedicar tu tiempo libre en crear un negocio online que pueda pegar un pelotazo o invertir el 5% de tus ingresos en nuevas start-ups que en el día de mañana se puedan convertir en el nuevo Facebook.

4.- Itera sobre el sistema aplicando la metodología de la mejora continua.

Si haces todo esto, te aseguro que hoy,  mañana, o dentro de unos años, te acabará visitando la suerte 😉

Recursos para ampliar sobre el tema del azar

¿Qué tal te han parecido estas casi 4.000 palabras?

Sin ninguna duda ha sido uno de los posts más difíciles de escribir, ya que he intentado simplificar algo tan abstracto como la suerte.

Espero que no te haya dolido la cabeza de tanta información y que lo hayas entendido bien 🙂

Si quieres preguntar cualquier duda ve directamente hacia la sección de comentarios e iniciaremos un debate muy interesante.

Si te flipa el tema de tener suerte como a mí y quieres ampliar un poco, te dejo todos los recursos que me han inspirado a escribir este post.

Y aquí, doy por finiquitado este post sobre cómo tener suerte.

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¿Qué te aparecido todo? ¿Qué es lo que crees tú que debemos hacer en nuestro día a día para tener buena suerte?

¡Escribe tu opinión en los comentarios y vamos a iniciar un buen debate!

2 comentarios en «El único secreto para tener buena suerte en la vida»

  1. «Aunque el resultado sea favorable, una mala decisión seguirá siendo una decisión estúpida»

    ¡Esto hay gente que no lo pilla! Como dice Buffett (por llevarme el tema a mi terreno), solo ves quién está nadando desnudo cuando baja la marea. Ahora todas las empresas suben, las que ganan dinero y las que pierden, las endeudadas y las saneadas, las buenas y las mediocres… y parece que jugar a la ruleta rusa es victoria segura.

    Creo que es Joel Greenblatt el que dice algo así como «Si cruzas un almacén de pólvora con una cerilla encendida, es posible que tengas éxito pero serás un idiota en cualquier caso».

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    • Exacto Antonio!

      Por eso mismo he puesto algunos ejemplos de tu temática, creo que es dónde mejor se ve la diferencia entre «suerte» y «buenas decisiones».

      Creo que leí esa frase en «el pequeño libro que bate al mercado». La cuestión principal es crear un sistema que te permita ganar más de lo que vas a perder 🙂

      Un fuerte abrazo Antonio y gracias por comentar!

      Responder

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